Me habían pedido en el ministerio
del tiempo que me acercara al Ateneo de Madrid en 1922. Estaba a punto de dar
una conferencia Rosa Chacel, una mujer que rompió moldes en su tiempo, y
precisamente la conferencia trataba de La mujer y sus posibilidades. Estaba
segura que muchos hombres no asistirían. Después de vestirme perfectamente de
la época, traspasé la puerta 105 y me encontré en el Madrid de 1922. Se parecía
al de ahora; pero la gente iba vestida de otra manera, vestidos largos entallados
de cintura, y las mujeres de alta alcurnia con una sombrilla que les tapaba del
sol. Llegué pronto al Ateneo. Me quedé sorprendida cuando obserbé entre el público
a Ortega y Gasset y a Miguel de Unamuno. Esta mujer debía de ser una maravilla
cuando estos famosos escritores iban a sentir su conferencia.
Estuve muy atenta a todo cuando
decía, muy interesante. Después la vi hablando muy amigablemente con el que
parecía su marido, un pintor conocido de la época, Timoteo Pérez. Todo el mundo
le hacía preguntas y yo no podía ser menos:
-Señora Chacel. ¿Usted cree que
el papel de la mujer cambiará en los próximos años?
--Estoy segura de que si, un
mundo que no valore a la mujer es un mundo abocado a su propia destrucción.
Esa respuesta me hizo pensar. Las
cosas habían cambiado; pero seguro que no tanto como esperaba Rosa.
Antes de ir a la conferencia me
informé bien de quien era Rosa Chacel y me enteré que poco después de la conferencia se trasladó
a Italia con su marido y no regresó a España hasta 1927, y es cuando su vida
literaria fue más productiva. El mismísimo Ortega y Gasset le encargó escribir
una biografía de la amante de Espronceda para una colección llamada Vidas
extraordinarias del siglo XIX. Siempre estuvo implicada en la política
colaborando en publicaciones de izquierdas. Como tantos otros marchó exiliada a
Buenos Aires y es allí donde escribió su mejor novela “La Sinrazón”.
Regresó a España por etapas; pero
no es hasta 1977 que vuelve definitivamente después de la muerte de su marido;
aunque también pasó largas temporadas en Río de Janeiro. Comenzaron a valorar
sus obras y se reeditaron muchas de ellas.
El caso es que a las mujeres les
costaba que las valoraran en esa época; pero ahora también. No han cambiado demasiado las cosas
desde principios del siglo XX.
Aunque tarde para mi costumbre no he querido faltar a la cita de Lucía
16 comentarios:
Buena aportación y aunque las cosas han cambiado, como tú bien dices han de cambiar mucho más.
Gracias por traernos a esta estupenda mujer a los Jueves,
Un beso.
Has usado la serie televisiva para viajar y conocer un poco mejor a tu protagonista, se agradece la esperanza que tenia ella en la raza humana y su evolución. Si vuelves a viajar no te la traigas contigo se llevaría una decepción. Saltos y brincos
Yo creo que si ellas se levantaran de sus tumbas y pudieran ver de la situación actual en la que aún tantas mujeres se encuentran sojuzgadas, maltratadas y desconsideradas, sentirían gran decepción por todo lo que queda por hacer.
Un fuerte abrazo
Un hallazgo mencionar a esa serie, que conozco por blogs y por este articulo de Axxon
http://axxon.com.ar/rev/2016/02/el-ministerio-del-tiempo-puertas-al-pasado-y-a-la-ensonacion-por-matias-carnevale/
Me pregunto que pensaría si viajara a la época actual y visitara la Argentina. Donde hay una vicepresidente mujer y una gobernadora de la principal provincia del pais. No sé si estaría de acuerdo con la ideología de ambas.
Delicisoso tu jueves querida Carmen! Esta mujer fué una de las pocas de su generación que pudo vivir el reconocimiento de su obra.
Gracias por tu viaje al pasado reciente, y por enseñarnos la vida de una mujer comprometida, y luchadora con los derechos y libertades de la mujer.
Gracias por participar este jueves .
Enhorabuena por los exitos que cosechas con tus obras.
Abrazos querida amiga.
Me ha encantado ese viaje, muy creativo. Rosa Chacel fue una de las agraciadas en ser reconocidas sus obras. Pero para las demás la invisibilidad histórica que han sufrido no es justa. Pese a la evolución, la igualdad dista mucho de ser real.
Beso
Hola Carmen Veo que hemos coincidido con el personaje. Y me alegro porque eso indica que tenemos gustos muy parecidos. Aunque a decir verdad, cualquiera de estas mujeres, valientes y pioneras en quitarse el sombrero, tienen unas vidas muy interesantes. Y les hemos de homenajearles, más a menudo. Se lo merecen todo.
un abrazo, guapa.
Todas son luchadoras de su trabajo y creencias , pero solo unas pocas lograron ese premio.
Bello aporte.
Besos
Rosa Chacel, un gran exponente, como nos cuentas, de esas mujeres que se reivindicaron en un mundo que las relegaba. Me ha resultado muy interesante.
Besos, amiga.
Me gustó conocer un poco más de esta mujer através de tu relato... gracias!
Un beso.
Al menos se hace justicia de alguna forma aunque queda tanto por hacer... y, a veces, tengo la sensación de no haber avanzado tanto, pero algo se ha logrado.
Sin duda, una grande...
Un beso enorme.
Gracias Tracy, Alma, Ester Demiurgo Juan Carlos, LUcia( gracias a ti por este gran tema), Montserrat,LLesin, Yessy y Demiurgo. La verdad es que queda mmucho camino por recorrer; pero gracias a ellas la cosa ha cambiado un poco.
Un abrazo
A medida que va pasando el tiempo, se van desterrando o sacando del cajón del olvido a estas escritoras y poetisas; no conocía el trabajo de Chacel. Muchas gracias. Saludos. Pablo.
Gracias a tu relato he conocido a esta gran mujer. Un beso Carmen
Has viajado en el tiempo, la mejor forma de vivir los hechos de un tiempo donde mujeres valientes dieron la cara y lucharon por lo que creían. Feliz tu viaje.
Besos.
Vaya, pues me ha gusta mucho leer tu aportación sobre Rosa Chacel, que como bien dices sí, hemos elegido escribir por la misma persona. Me ha encantado el punto de vista tuyo y toda la información que de ella aún solía desconocer.
Gracias Carmen.
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