Mirando el mar, observo
ese reflejo lleno de movimiento y de matices
de colores. No me puedo creer que sea el espejo de esos edificios inertes, sin
vida, que convidan al desánimo. Si la naturaleza consigue esa maravilla, seguro
que nosotros somos capaces de mover montañas para conseguir aquello que nos
propongamos, sólo hemos de creerlo firmemente y se hará realidad.
3 comentarios:
Movimiento, colores, vida se refleja en el vaivén del agua.
Sabia la naturaleza, cuando nos enseña. Seria importante tomar nota y estudiarla, pero no de memoria, sino de manera que nos haga reaccionar.
Me gusto ese cuadro con tantos matices.
Un abrazo :)
Es así, tal cual. Crear y si se puede, crear belleza para inventarnos un mundo que nos estimule a vivir y ver qué se puede hacer por el que nos toca, no está nada mal.... mejor: ESTA MUY BIEN!!!
Besos
que lindo, me encanto la imagen!
:)
saludos
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