Es difícil la elección; pero yo me veo un chocolate con
leche, no demasiado sofisticado, sabor suave, adecuado para una merienda. Los
rellenos de almendras, avellanas, con naranja, menta, limón, nueces de
macadamia, etc.; aunque a mi me gustan mucho, yo, no me veo.
Así soy yo, un chocolate con leche, con un sabor no tan
fuerte y amargo como un chocolate negro. Más bien dulzón, que bien puede
acompañar a un café entre descafeinado, o poco intenso, vamos una mezcla, que
siempre se puede combinar con todos los sabores, ya que al no destacar en
exceso, su sabor no dominará sobre el resto.
El chocolate, esa gran tentación, que cuando cae en nuestras
manos una onza no podemos resistirnos a comérnosla. Puede que engorde, puede
que sea malo abusar, es verdad; pero, ¿Quién se resiste a él?
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18 comentarios:
Compro tu chocolate , ya.
Yo creo tener preferencia por los rellenos.
Voy a hurgar más por aquí...
Me gusta el chocolate, preferentemente el negro pero me gustan tambien los demás, caliente, frío, con pan, dentro del café. He cogido dos onzas y te dejo un abrazo
LO QUE SE DICE UN SABROSO RELATO!!!!
Yo soy más de chocolate amargo, pero el chocolate con leche está también muy bueno, aunque por alguna razón siempre me recuerda a la infancia.
Un saludo.
A veces el mas sencillo es el mas seductor y apetecible que el mas elaborado chocolate...y como dicen hay paladar para todos los gustos...besososos
Bien elegido tu chocolate porque eres una persona dulce. Me gusta tu reflexión del por qué lo has elegido.
Un beso.
a mí me encanta comerlo, pero de ahí a intentar imaginarme sobre una variedad concreta del susodicho manjar... nada! que no se me ocurre jaja
Un abrazo chocolatoso!
querida Carmen: el chocolate con leche, este que tu dices que entra tan suave y que combina con todo, este no engorda, no. Este RELLENA todos los vacios que encuentra, y no se mueve de allí, per los siglos de los siglos. Un besote
Así te imagino yo , una persona tierna.
Un abrazo.
Maribel
Un chocolate que armoniza con el resto, me ha gustado
Un beso, Carmen
Tierna y dulce entrada. Pero me temo que en la vida, como en los chocolates, cada momento tiene su sabor.
Y después de hacer de Forrest Gump, recibe un beso relleno de mi admiración.
Gracias Tracy, Demiurgo, Ester, Montserrat, Maribel, Neo, Leonor, Pikxi, Diva, Ame, jordin, Juan Luis y Lao. Es verdad que cada momento tiene su chocolate; pero es este en el que estoy más agust.
Un abrazo
Buena elección... una ternura, y es eso lo que (me) inspiras.
Un beso.
UN PENSAMIENTO DELICADO Y DULCE.
ABRAZOS
Pues algún capricho nos hemos de poder permitir, digo yo.
¿Chocolate? Siempre hay un sabor para un momento.
Un beso enorme, niña.
Yo me quedo con los de menta... ñam.
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