Nuestra amiga Neogéminis nos ha propuesto jugar con dos palabras que aparentemente no tienen que ver; aunque a veces van en parejas:
Verdad y/o consecuencia
Destino y/o azar
Causa y/o efecto
Olvido y/o memoria
Sustancia y/o
apariencia
Miedos y/o culpas
De todas ellas yo he escogido, destino y/o azar.
Raquel siempre había creído en el
destino, y pensaba que daba igual lo que hicieras en la vida, porque estabas predestinado.
Su amiga Laura la contradecía, y le comentaba que muchas de las cosas que le
suceden a uno son causa del azar y nada
más. De hecho Laura era mucho más feliz que Raquel, que estaba obsesionada con
el destino que le esperaba.
Un día, las dos paseaban por la calle, quedaron para tomar
un café y hablar de sus cosas. Cuando se encontraban apenas a dos pasos de la cafetería, un coche
que venía a toda velocidad se salió de la calzada y atropelló a las dos amigas,
saliendo peor parada Raquel, que quedó inconsciente en la acera, en cambio
Laura solo tuvo una pequeña conmoción, se levantó, y aunque un poco mareada se
acercó donde estaba su amiga y no podía parar de llorar. De dentro del coche
salió un chico muy asustado, le habían fallado los frenos y no pudo controlar
el coche, estaba en estado de xoc, y Raquel seguía sin moverse. No tardó en
llegar la ambulancia, llevándose a las dos amigas, por suerte Raquel despertó;
pero la pierna derecha estaba destrozada y tardaría en recuperarse. En todo el
tiempo que permaneció en el hospital aquel chico que la atropelló no dejó de
visitarla ni un solo día. Al principio Raquel pensó que probablemente sería por
un sentimiento de culpabilidad; pero poco a poco se dio cuenta de que entre
ambos había nacido un sentimiento, parecía mentira pero era así.
Ya en casa, un día de los tantos que Laura la visitaba, en un momento
determinado ésta comenzó a reír.
--¿De qué te ríes? Le preguntó Raquel.
--Pienso que las dos teníamos razón.
--¿A qué te refieres?
--Pues que el destino quiso que tuvieras el accidente y el azar
quiso que conocieras a la persona con quien compartirías tu vida.
MÁS DUETOS EN CASA DE NEO
15 comentarios:
Creo que es inversa de lo que plantea Laura. Pero es un interesante planteo.
Al final las dos amigas quedaron en tablas.
Un planteamiento cuanto menos para ordenar conceptos. Abrazos
Vaya, pues el destino podía haberse manifestado de un modo más suave, ¿verdad?
En todo caso, buen relato, amiga.
Besos.
Ay! que doloroso fue encontrarse a su alma gemela. Pero con un buen final, eso es lo mas importante. Muy original tu relato, Carmen.
Un beso
En esos caminos insondables que tiene la vida, el azar muchas veces parece querer ser protagonista. Otras, es la decisión personal la que logra marcar el rumbo del barco de nuestro destino.
Una historia en el que la tragedia, por suerte, vira hacia una faceta menos tremenda y más optimista.
Muchas gracias por sumarte a mi convocatoria. a la brevedad armaré la entrada con los participantes.
Un abrazo
Precioso, me ha gustado mucho.
Quizá ese azar es fruto del destino... Este es siempre sorprendente.
Muchos besos
Demiurgo, bueno, no había pensado que fuera al revés.
Gracias Carmen, Ester, Neo, Yessy, Juan Carlos y Tracy.
So, fue un poco duro; pero es lonque tiene el destino.
Un abrazo.
...o no hay mal que por bien no venga.
Hubo suerte, y estaba escrito, y asi dejamos a todos contentos....;)
Linda historia, después del duro trance, pero a lo bueno buesta caro (dicen..)
besos Carmen
Destino y azar. Más de una vez he discutido (en el buen sentido) sobre el tema. Creo que ambas tienen razón, los dos actúan a su modo en nuestras vidas.
A través de una vivencia común, las dos amigas se enfrentan a las cosas del destino... y a las cosas del azar.
Buen relato y buen planteo Carmen!
Besos!
Gaby*
Bueno al menos de algo bastante malo, sacó otra cosa buena, así es el destino impredecible y el azar sorpresivo.
Un beso!
Hola Carmen, un placer haberte conocido, y ahora visitar tu blog.
hay en el destino una predeterminación de nuestras vidas, o es puro azar?
un abrazo
Gracias Rodolfo(el placer fue mío Gaby, Casss y Sindel.Las cosas del destino y las cosas del azar. Bien está lo que bien acaba.
Un abrazo
Bonito cuento con final feliz. Siempre hay alguien al que lo toca la lotería a pesar del casi inexitente índice de probabilidades. Me pregunto si es preciso que para que sucedan las cosas que nos gustan, hemos de pasar por las que no nos gustan... ¡Vaya lío!
Besos
Buenas tardes, Carmen:
En tu relato capturas la esencia de lo que son los caprichos del destino: ese golpe que se lleva la vida cuando lo improbable se hace real.
Me gusta el enfoque positivo que le das a la confluencia entre el Azar y la Casualidad.
Un abrazo, Carmen.
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